Murcia, la primera comunidad que da marcha atrás al uso de pantallas en las aulas
Alguien tenía que ser el primero en nuestro país. Hablamos del primer gobierno autonómico que toma la decisión de sacar las pantallas de las aulas en Primaria salvo que la tecnología aporte algún valor añadido. Y es que ahí está la clave del asunto. Porque la “digitalización” que tanto nos vendían como un gran paso en la educación… es un fiasco y no ha aporta valor añadido alguno.
Un fiasco que solo ha sumado más rapidez para algunas labores de los docentes y poco más. Lo cual no es que no sea importante pero en quien hay que pensar cuando se enseña es en el alumnado. En su aprendizaje. Por encima de todo. Si con las pantallas no aprenden ni más ni mejor, y además empeoran otras habilidades como la concentración, la memorización o la escritura, blanco y en botella. No hay discusión posible.
Ya otros países han dado el paso y, en España, también algunos colegios se han dado cuenta de que esta mal llamada digitalización que pasa por meter los contenidos en tablets y chromebooks, y en hacer ejercicios interactivos, no sirve y sólo ha empeorado resultados. Y porque ya somos muchas familias las que hemos visto que esto no funciona y, por ello, nos hemos opuesto en nuestros centros a seguir por el mismo camino.
Seguir adelante y seguir defendiendo esta digitalización solo puede responder a intereses económicos que, a estas alturas, sabemos que los hay.